El presidente estadounidense, Donald Trump, ha intensificado las tensiones en la actual guerra comercial con China con una nueva decisión. En círculos de Washington, esta medida se considera una continuación de la estrategia de la administración Trump de «aumentar la presión económica sobre China».
Las tensiones provocadas por las disputas comerciales entre EE.UU. y China se han intensificado en los últimos meses, especialmente debido a las disputas sobre aranceles, restricciones tecnológicas y control sobre materias primas clave.