La Unión Europea ha puesto en marcha una nueva iniciativa estratégica denominada «REsourceEU», cuyo objetivo es reducir la dependencia de la UE de China en materias primas críticas como los metales de tierras raras, el litio, el cobalto y el níquel, componentes esenciales de las baterías utilizadas en los vehículos eléctricos, las turbinas eólicas y los dispositivos electrónicos modernos.
El plan, que forma parte de la Estrategia Industrial Verde de la Comisión Europea, pretende diversificar las cadenas de suministro, aumentar la capacidad de reciclaje y reforzar la producción nacional en los Estados miembros de la UE. Bruselas también quiere establecer nuevas asociaciones con países ricos en recursos como Australia, Canadá y algunas economías africanas para garantizar un acceso estable y sostenible a los materiales esenciales.
«Europa no debe sustituir una dependencia por otra», declaró Thierry Breton, Comisario Europeo de Mercado Interior. «REsourceEU garantizará que nuestra transición hacia la energía limpia sea a la vez ecológica y geopolíticamente segura».
El programa incluye
Desarrollar centros de reciclaje financiados por la UE para la recuperación nacional del 20% de las tierras raras para 2030.
Creación de un Fondo Europeo de Materiales Críticos para financiar proyectos de exploración y transformación.
Constituir reservas estratégicas para absorber posibles crisis de suministro.
Introducción de nuevas normas medioambientales para garantizar prácticas de adquisición responsables con socios globales.
Desde el punto de vista económico, la iniciativa refleja la creciente preocupación de Europa por la vulnerabilidad de las cadenas de suministro, especialmente después de que la pandemia y la crisis energética de los años veinte demostraran la fragilidad de las rutas comerciales mundiales. China controla ahora más del 80% de la capacidad mundial de procesamiento de tierras raras, ejerciendo una influencia significativa en los sectores que abastecen a las industrias europeas de energía limpia y defensa.
REsourceEU podría estimular miles de millones de euros de inversión en los sectores de la minería y el reciclaje en Europa. Esto crearía decenas de miles de empleos ecológicos, al tiempo que reduciría las presiones inflacionistas relacionadas con la importación de tecnologías críticas, según los analistas financieros.
Sin embargo, los expertos advierten de que la aplicación de la estrategia llevará años, ya que los permisos medioambientales, el desarrollo de infraestructuras y la aprobación de los gobiernos locales siguen siendo obstáculos importantes en un entorno europeo muy regulado.
Sin embargo, si REsourceEU tiene éxito, podría representar uno de los cambios más significativos en la política industrial de la UE desde la creación del mercado único, combinando flexibilidad económica, ambiciones medioambientales y confianza geopolítica en un marco coherente.
