La Red de Infraestructura Fiduciaria de Liechtenstein (LTIN, por sus siglas en inglés) se ha puesto en marcha oficialmente en virtud de la innovadora Ley de la cadena de bloques de Liechtenstein (TVTG, por sus siglas en inglés) y se está estableciendo como una red de cadena de bloques soberana y conforme a la normativa para empresas e instituciones. La iniciativa cumple plenamente el Reglamento sobre Mercados de Criptoactivos (MiCAR) de la UE, lo que la convierte en una de las primeras infraestructuras legalmente reconocidas en Europa que combina la tecnología blockchain con los marcos reguladores tradicionales.
La iniciativa es en gran parte estatal y está gestionada por Telekom Liechtenstein. Entre los primeros partidarios figuran Bank Frick, Bitcoin Suisse, Solstice y Zilliqa, así como socios tecnológicos como el Grupo Inacta, la Fundación LUKSO, QPQ y la suiza Subnetwork.
El LTIN proporciona validación a nivel empresarial, gestión de identidad, procesamiento de transacciones y autenticación digital segura, todo ellobasado en la soberanía de los datos dentro de la jurisdicción europea y un compromiso con la energía 100% renovable. Esto posiciona a LTIN como una capa de infraestructura centrada en el cumplimiento para casos de uso críticos de blockchain en finanzas, identidad y cadena de suministro.
«LTIN proporciona servicios de confianza soberana e integridad para los mercados globales», dijo Franz Wirnsperger, Presidente de la red. «Nuestro objetivo es hacer de Liechtenstein un centro europeo para la innovación de blockchain conforme».
El proyecto se ejecutará en un modelo de asociación público-privada que invitará a otros participantes institucionales, sujeto a los requisitos legales y reglamentarios.
Los observadores del sector señalan que LTIN podría convertirse en un modelo para las redes nacionales de blockchain alineadas con MiCAR, ofreciendo una alternativa a las infraestructuras no reguladas o extraterritoriales. Al combinar la gobernanza soberana, la energía verde y las normas europeas de protección de datos, Liechtenstein se está posicionando como un puente digital de confianza entre las finanzas descentralizadas (DeFi) y las instituciones tradicionales.
