El Financial Times informó de que las empresas mostraron interés en el programa piloto stablecoin de Hong Kong y en los productos de activos tokenizados, pero se les dijo que detuvieran sus planes ante el temor de que las monedas emitidas de forma privada pudieran desafiar la autoridad del banco central y el yuan digital (e-CNY).
La intervención de Pekín refleja preocupaciones reguladoras más amplias sobre los riesgos sistémicos de las stablecoins y la soberanía de la moneda. Antiguos funcionarios del banco central han pedido una evaluación cuidadosa de las transacciones con tokens y su posible uso indebido para la especulación o el fraude. Los reguladores de Hong Kong han posicionado a la ciudad como campo de pruebas para la concesión de licencias de stablecoin, pero la cautela de las autoridades continentales ha frenado el impulso de las empresas e intermediarios que están considerando participar.
