LONDRES, 23 de octubre La economía europea se encuentra en un precario equilibrio entre las tensiones geopolíticas y los juegos de poder económicos mundiales. Esta situación podría empujar a la UE a diversificar su comercio y fomentar la confianza, o dejarla vulnerable a fuerzas externas destructivas. Al optar por la absorción en lugar de las represalias contra los aranceles arrolladores del presidente estadounidense Donald Trump, la UE pretende mantener el apoyo de Estados Unidos durante las tensiones de seguridad con Rusia por Ucrania.
Los analistas señalan que esta estrategia refleja la delicada posición de Europa en el comercio mundial, donde las decisiones económicas están estrechamente vinculadas a las alianzas geopolíticas y a consideraciones de seguridad.