Este paso marca una rara ruptura en la larga tradición del país de emitir monedas conmemorativas en honor de la cultura y la innovación alemanas.
Según el Bundesbank, el Ministerio Federal de Finanzas ha decidido aplazar dos monedas de plata – una de 25 euros y otra de 20 euros – debido al aumento de los costes de material. La primera, cuya salida al mercado estaba prevista en noviembre, iba a representar a los «Reyes Magos». La segunda, prevista para enero, se titulaba «125 años del ferrocarril colgante de Wuppertal» e iba a rendir homenaje a uno de los logros más emblemáticos de la ingeniería alemana.
Aunque la subida de la plata ha sido menos espectacular que la del oro, los precios han subido tanto que el contenido metálico de cada moneda supera ya su valor facial oficial. Esto ha llevado al popular programa alemán de monedas de plata para coleccionistas -apreciado tanto por los numismáticos como por los amantes de la cultura- a una encrucijada.
Los expertos señalan que la suspensión puede ser sólo temporal. Sin embargo, si los precios de los metales preciosos se mantienen altos, es posible que Alemania tenga que considerar la posibilidad de utilizar menos plata pura o metales alternativos para futuros gastos. No obstante, es poco probable que disminuya la pasión del país por celebrar su patrimonio cultural y su ingenio técnico a través de monedas conmemorativas, aunque ahora haya que considerar cuidadosamente el coste de hacerlo.
